Cuáles son las serpientes venenosas en España
En España, hay varias especies de serpientes venenosas que habitan en distintas regiones del país. Estas serpientes se caracterizan por poseer glándulas venenosas en su cabeza, las cuales les permiten inyectar veneno a través de sus colmillos. Si bien la mayoría de las serpientes en España no son venenosas, hay algunas especies que representan un peligro para los humanos. En este artículo, exploraremos cuáles son las serpientes venenosas en España y qué características las distinguen.
Especies de serpientes venenosas en España
En España, existen cinco especies de serpientes venenosas: la Víbora del Pirineo, la Víbora Cantábrica, la Víbora hocicuda, la culebra bastarda y la culebra cogulla. Cada una de estas especies tiene características únicas que las diferencian y las hacen reconocibles.
Víbora del Pirineo
La Víbora del Pirineo (Vipera seoanei) es la serpiente venenosa más grande y letal de España. Se encuentra principalmente en el Pirineo catalán y aragonés, aunque también puede encontrarse en otras regiones montañosas del país. Esta serpiente tiene un cuerpo grueso y una cabeza triangular distintiva, que es donde se encuentran sus glándulas venenosas. Su veneno es muy tóxico y puede causar graves consecuencias en los humanos si no se trata de inmediato.
Características de la Víbora del Pirineo
La Víbora del Pirineo tiene un promedio de longitud de 60-70 centímetros, aunque puede llegar a medir hasta un metro. Su cuerpo es robusto y su piel está cubierta de escamas. Presenta una coloración característica, que suele ser marrón o gris, con manchas oscuras en forma de zigzag a lo largo de su espalda. Su cabeza es grande y ancha, con un hocico prominente y una fila de escamas superciliares que le da un aspecto distintivo.
Esta serpiente es muy ágil y puede moverse rápidamente, especialmente cuando se siente amenazada. Se alimenta principalmente de pequeños mamíferos, aves y reptiles, a los que captura con su mordedura venenosa. A diferencia de otras serpientes venenosas, la Víbora del Pirineo no es agresiva y solo muerde cuando se siente acorralada o en peligro.
Víbora Cantábrica
La Víbora Cantábrica (Vipera seoanei cantabrica) es otra especie de serpiente venenosa que se encuentra en España. Su hábitat principal son las zonas montañosas del norte de la Península Ibérica, como los Picos de Europa y la Cordillera Cantábrica. A diferencia de la Víbora del Pirineo, la Víbora Cantábrica tiene un veneno menos potente y su tamaño es más pequeño.
Dispersión de la Víbora Cantábrica
Relacionado:Cómo identificar signos de que un conejo está muriendoLa Víbora Cantábrica tiene una coloración similar a la Víbora del Pirineo, con un fondo marrón o gris y manchas oscuras en forma de zigzag. Sin embargo, su tamaño promedio es de 50-60 centímetros, siendo las hembras más grandes que los machos. Esta especie se caracteriza por tener una cabeza bastante ancha y triangular, con una pupila vertical distintiva.
Aunque suele habitar en zonas montañosas, la Víbora Cantábrica también puede encontrarse en áreas más bajas, como pastizales y matorrales. Se alimenta principalmente de roedores, aves y anfibios, a los que puede capturar con su mordedura venenosa.
Víbora hocicuda
La Víbora hocicuda (Vipera latastei) es otra de las serpientes venenosas presentes en España. Se distribuye por todo el país, excepto en las Islas Canarias, y su veneno es menos potente que el de las especies anteriores. Aun así, su mordedura puede ser peligrosa si no se trata adecuadamente.
Veneno y hábitos de la Víbora hocicuda
La Víbora hocicuda presenta una coloración variable, que puede ser desde marrón claro hasta gris oscuro o casi negro. Su cabeza es ancha y redondeada, con un hocico prominente que le da su nombre. Aunque su tamaño suele ser de 50-60 centímetros, puede alcanzar los 80 centímetros en casos excepcionales.
Esta serpiente es más activa durante la noche y en los meses más cálidos del año. Se alimenta principalmente de pequeños mamíferos, como ratones y topillos, así como de aves y lagartos. Su veneno actúa sobre el sistema circulatorio de sus presas, causando shock y parálisis. En humanos, los efectos del veneno pueden ser graves, especialmente si la mordedura no se trata rápidamente.
Culebra bastarda
La culebra bastarda (Malpolon monspessulanus) es la serpiente más grande de Europa y también se puede encontrar en España. Aunque no es venenosa, su tamaño y apariencia pueden generar confusión. Es importante saber cómo diferenciarla de las serpientes venenosas para evitar malentendidos y temores injustificados.
Información sobre la culebra bastarda
Relacionado:Qué enfermedades transmiten los perros a los humanosLa culebra bastarda tiene un cuerpo largo y delgado, que puede alcanzar los dos metros de longitud en algunos casos. Su coloración generalmente es verde oliva, con manchas más claras y oscuras a lo largo de su cuerpo. A diferencia de las serpientes venenosas, la culebra bastarda tiene una cabeza estrecha y puntiaguda, sin glándulas venenosas.
Esta serpiente es muy ágil y rápida, y se alimenta de pequeños mamíferos, aves, lagartos e insectos. Aunque no es venenosa, la culebra bastarda puede morder si se siente amenazada, pero su mordedura no representa un peligro para los humanos.
Culebra cogulla
La culebra cogulla (Macroprotodon brevis) es otra especie de serpiente no venenosa en España. Esta serpiente es de tamaño pequeño, con una longitud promedio de 40-50 centímetros. A diferencia de otras culebras, la culebra cogulla se caracteriza por tener una cabeza más ancha y triangular, similar a la de las víboras.
Aunque su apariencia puede generar confusión, la culebra cogulla no es venenosa y su mordedura no representa un peligro para los humanos. Se alimenta principalmente de pequeños reptiles y anfibios, a los que suele capturar en terrenos rocosos y arenosos. Su coloración varía, pero suele ser una combinación de marrón, negro y gris, con manchas oscuras en su cuerpo.
Importancia de buscar atención médica tras una mordedura
Si sufres una mordedura por una serpiente venenosa en España, es crucial buscar atención médica de forma inmediata. Aunque las víboras y otras serpientes venenosas en el país no suelen atacar a los humanos, es posible encontrarse con ellas en su hábitat natural y su mordedura puede tener consecuencias graves.
El veneno de las serpientes venenosas en España puede causar síntomas como hinchazón, dolor intenso en la zona de la mordedura, sangrado, alteraciones en la presión arterial y dificultad para respirar. En algunos casos, puede producirse una reacción alérgica severa, conocida como shock anafiláctico, que puede ser potencialmente mortal.
Es importante evitar intentar tratar la mordedura por serpiente venenosa de forma casera y acudir directamente a un centro médico especializado. Los profesionales médicos podrán evaluar la situación, administrar el tratamiento adecuado y, si es necesario, aplicar un suero antiveneno específico para el tipo de serpiente que causó la mordedura.
En España existen varias especies de serpientes venenosas, como la Víbora del Pirineo, la Víbora Cantábrica, la Víbora hocicuda, la culebra bastarda y la culebra cogulla. Cada una de estas serpientes tiene características únicas y su veneno puede representar un peligro para los humanos si no se trata adecuadamente. Ante una mordedura por una serpiente venenosa, es fundamental buscar atención médica de forma inmediata para prevenir daños graves.
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